Refugiados cubanos disfrutan el verano en la piscina

No se si en el video se alcanza a comprender, pero yo soy el que controla la piscina en estos apartamentos, jeje. Na, ese día nos reunimos unos cuantos cubanos de los apartamentos de Wesvill en Raleigh y nos fuimos a bañarnos en la piscina un rato y a compartir y a pasarla bien.

Después se dio un pequeño incidente con un árabe fuera de vista que no comprende que nosotros los cubanos somos lo máximo y los que “administramos” la piscina y llamo a la policía, pero na, igual le dijeron que no tenia razón y no paso nada.

Por cierto ya pasamos la regla, de que a la piscina se viene a bañarse no a lavar la ropa como acostumbraban a hacer algunas árabes que iban con la sobrecama encima y hasta con la funda de la cabeza, no no no, si los maridos no las dejan quitarse los trapajos esos, mejor que se bañen en la bañadera de su casa y si no tienen que se metan en una palangana, pero esa mano de ropa prieta no las permitimos mas en la piscina.

Video de Nelson Herrera Ayala, con la conga cubana.

Este soy yo, Nelson Herrera Ayala, de Luyano, de la Habana, de Cuba. Mi primer video en youtube, con música cubana de los carnavales. Para quien no entendió el principio del video, es una búsqueda en google, con mi nombre, donde se ve que aparezco en varias paginas por mi labor dentro de la oposición en Cuba

Nelson, de Luyano a Raleigh, NC

Yo soy Nelson el de Luyano: Fui balsero y doy gracias a Dios  por haberme permitido cruzar parte del estrecho de la Florida y haber quedado con vida para hacer el cuento. En el ano 94 me encontraba en la Base Naval de Guantanamo junto a otros miles de cubanos. Regrese a Cuba cruzando los campos minados y me incorpore a la oposición.

Pertenecí al Partido 30 de Noviembre y al movimiento 20 de Mayo. Participe en varias actividades dentro de la oposición pidiendo libertad para el pueblo de Cuba y para los presos de conciencia. En muchas ocasiones fui acosado por la Seguridad del Estado cubano.

Hoy en día me encuentro en Estados Unidos, en Raleigh, la capital de Carolina del Norte y me siento agradecido con Dios, por estar a salvo con mi familia en este lugar. Esta es una gran ciudad, a la cual poco a poco me voy acostumbrando. Sin embargo lamento y siento por los hermanos de lucha que se encuentran en cuba que están pasando por lo mismo que yo pase.